El martes 30 de noviembre de 2021, el Gobierno aprobó el Proyecto de Ley de creación y crecimiento de empresas, vulgarmente conocida como “Crea y Crece” (“Proyecto”), con la que pretende impulsar la constitución de las sociedades de responsabilidad limitada de forma rápida, ágil y telemática, así como promover la creación de empresas mediante el abaratamiento de sus costes de constitución, ampliando las opciones de los socios fundadores respecto al capital social que desean suscribir en función de sus necesidades y preferencias.

Como medida más sonada, se introduce la creación de sociedades de responsabilidad limitada desde solo un euro, frente a la cantidad mínima de capital social de 3.000 euros, establecida para este tipo de sociedades en la actual Ley de Sociedades de Capital (“LSC”).

A fin de cuentas, el desembolso de las cantidades mínimas establecidas en la LSC tiene como principal función actuar como garantía frente a terceros, por lo que la rebaja del capital social mínimo hasta la cifra de un euro no se llevará a cabo sin medidas tendentes a salvaguardar los intereses de los futuros acreedores que contratarán posteriormente con la sociedad. 

Como medios de garantía el Proyecto establece que, de hacer uso de la nueva regulación y constituir una sociedad con un capital inferior a 3.000 euros, se deberá destinar a reserva legal al menos el 20% del beneficio hasta que la suma de la reserva legal y el capital social alcance el importe de 3.000 euros y, que en caso de liquidación,  si el patrimonio de la sociedad fuera insuficiente para atender el pago de las obligaciones sociales, los socios responderán solidariamente de la diferencia entre el importe de 3.000 euros y la cifra del capital suscrito.  

Otras de las modificaciones que pretenden agilizar todo el proceso de constitución de sociedades, son las modificaciones de los plazos de inscripción del Registro Mercantil, que modifica el plazo a 5 días desde la fecha del asiento de presentación, y el fomento del uso del Centro de Información y Red de Creación de Empresas (“CIRCE”), que obliga a los notarios y los intermediarios que asesoren y participen en la creación de las sociedades de responsabilidad limitada, de informar a los fundadores de las ventajas de emplear los Puntos de Atención al Emprendedor (“PAE”) y CIRCE, para su constitución y realización de todos los trámites ligados al inicio de su actividad.

Por último, el “Crece” de la Ley, se materializa a través de modificaciones en las fuentes de financiación, estableciendo, por ejemplo, la posibilidad de agrupar a los inversores en una sociedad de responsabilidad limitada, cuyo objeto social y única actividad consista en ser tenedora de las participaciones de la empresa en que se invierte, quedando sujeta a la supervisión de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, o en otras figuras que se utilicen habitualmente para estos fines en otros Estados miembros de la Unión Europea. 

Recordar que dichas plataformas también conocidas como plataformas de “crowdfunding” son empresas cuya actividad consiste en poner en contacto, de manera profesional y a través de páginas web u otros medios electrónicos, a una pluralidad de personas físicas o jurídicas que ofrecen financiación con otras personas físicas o jurídicas que la solicitan en nombre propio para destinarlo a un proyecto concreto.
 

Ignacio Rico Aranguren. Abogado

Larrauri & Martí Abogados

Mercantil