22
jun-2021
Son numerosas y recientes las manifestaciones públicas de políticos de todas las ideologías en favor de las regiones españolas más azotadas por la despoblación, pero, de momento, esas promesas no se han materializado en actuaciones reales que reviertan esta tendencia.
De hecho, los previstos aumentos impositivos en carburantes, impuesto de matriculación y peajes parecen ir en la dirección contraria al hacer más caro el vivir en estas zonas en las cuales las distancias entre localidades son considerables y el automóvil privado es lo que permite que sus habitantes tengan una cierta calidad de vida en forma de facilitar el acceso a servicios públicos básicos (educación, sanidad, etc..) y la posibilidad de realizar las compras necesarias en localidades próximas a donde residen.
Asimismo, todos estos impuestos no hacen sino mermar la competitividad de todas las empresas y profesionales que trabajan en estas zonas al encarecer el trasporte tanto de los productos que consumen y necesitan para su actividad como de sus productos. Este encarecimiento es mayor que en las zonas más urbanizadas de nuestro país en las cuales la población está mucho mas concentrada y, por ende, los costes son menores, produciéndose economías de escala que no son posibles en las zonas rurales.
Todo nos lo cuenta en detalle nuestro compañero David Álvarez en este artículo que publica Expansión.
15-04-2025 / articulos